La máquina Iperespresso de la marca Illy pone el arte del barista… al alcance de un botón.
“Un espresso perfecto, como nunca lo has visto, probado ni imaginado”: ésa es la promesa de la empresa italiana Illy, una de las más importantes del mundo. Sus máquinas de cápsulas lucen la apariencia cromada y espectacular de un auto de Fórmula Uno (en la Argentina, se consiguen en Import Coffee Company). Se llaman Iperespresso y fueron diseñadas por el capo Luca Trazzi. Si es cierto que el espresso perfecto se hace con 6,7 gramos de la mejor mezcla de café, con temperatura, presión y tiempo exactos, el del barista es todo un arte que ahora está al alcance de un botón: “Illy lo perfeccionó realizando una cápsula protegida por cinco patentes”.
Quiero una (a esta altura del partido, podría convertirse en mi cafetera número… 29). Más allá de la inconfundible belleza de la máquina, ¿cómo sale el café? La consistencia es suave y aterciopelada, con un aroma siempre intenso. La espuma es muy duradera (¡parece casi sólida!) porque la máquina trabaja por infusión y emulsión. En síntesis: “El diseño inconfundible recuerda los gestos del barman y el espresso que prepara en casa es como el del bar”. El resultado es inequívoco: ¡un espresso italiano memorable!
